Hay pocas cosas que resistan dignamente el paso de los años, pero ver este vídeo, las bicis, los cascos, y las indumentarias del pasado, podríamos decir cercano, resulta divertido.
Y al hilo de esto, el otro día buceando en el antiguo blog de mi amigo Jose encontré un post tan maravilloso como su título: "Maravillosos 90", en el que se pueden reconocer esos lugares que no hemos dejado de recorrer en los últimos veinte años y alguno más que se va sumando.
Os dejo algunas fotos y uno de los párrafos de aquella entrada seguro de que a él no le importará.
La Peña de los Cuatro Jueces irreconocible sin sus grandes pinos.
El paso de Cuatro Jueces a las pistas que suben a las antenas del Fario.
Y una serie del descenso del Fario despoblado de árboles.
O con los pinos del tamaño de un árbol de Navidad.
Cómo quedaban las manos después de un descenso con los cantilever...
"A principios de los 90 paseábamos con nuestras bicicletas por los mismos lugares que lo hacemos hoy en día. En aquellos días solíamos llevar los famosos cascos Bell que regalaban con la suscripción a la revista BTT y nuestro atuendo deportivo era un poco de aquella manera. Los rastrales eran lo que se llevaba y los playeros o las botas no tenían nada que ver con las que usamos en la actualidad.
Eran tiempos felices y nuestros corazones iban a menos pulsaciones que hoy en día. Había más caminos de tierra y menos asfalto en los alrededores de Gijón. Estábamos menos preparados físicamente pero lo pasábamos como los indios todos los sábados por la mañana. El que escribe tiene la fortuna de seguir disfrutando de su caballo alado, de las montañas, de los senderos y de sus amigos de la misma manera que hace 18 años."
Jose, estoy de acuerdo en todo menos en lo de las pulsaciones, te aseguro que mi corazón iba por esos sitios siempre a punto de reventar.
Jose lo mejor es que lo seguimos contando con la misma ilusión.
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