Por segundo día consecutivo nos levantamos viendo el amanecer, hacemos un buen desayuno y seguimos con la rutina diaria de preparar las bicicletas para la ruta. Calculábamos que esta etapa hasta Cortijo Lorenzo, un alojamiento rural en la carretera que desde la sierra baja a Abrucena nos saldría de unos escasos 80 kms., al final resultaron 94. La importancia de un buen alojamiento que nos permita no perder cota en esta etapa es fundamental de cara a la etapa siguiente en la que hay un largo ascenso a lo alto de la sierra.
Salimos de Jérez sin encontrar ninguna fuente y sin agua, lo que hizo que un principio nos asaltaran las dudas sobre si era conveniente empezar a dar pedales sin reservas líquidas, pero confiando en encontrar algo por el camino nos ponemos en marcha retomando la pista en el mismo punto donde la habíamos abandonado el día anterior a la entrada de Jérez del Marquesado.
Con el Picón de Jérez en frente.
Pista en ascenso de buen firme y desniveles llevaderos que discurriendo entre pinares nos coloca frente al Picón de Jérez, en el que situamos imaginariamente el avión accidentado en marzo de 1960. (La historia en el blog de mi compañero, Jose).
Área Recreativa de la Tizna.
Más adelante encontramos agua en el cauce de un barranco y en la bonita Área Recreativa de La Tizna, el agua era tan abundante en esta primera parte de la etapa, como escasa en la segunda. Dejamos atrás el final de la etapa 2 que la guía de la Junta de Andalucía fija en Abrigo de la Solana y con mucho calor seguimos hasta lograr una buena sombra para comer y descansar un rato en el barranco de Isfalada.
La señalización es muy buena.
Panel informativo en Abrigo de la Solana, la divisoria de las etapas 2 y 3
Llegando al Barranco de Isfalada, donde hicimos una pausa
y aprovechamos a comer.
Tras la comida seguimos la ruta en ascenso, las subidas y bajadas son constantes. Así, con el sol apretando, vamos haciendo kilómetros hasta llegar a la Fuente del Rosal, creo que fue el último punto donde encontramos agua.
Abajo la llanura del Marquesado del Zenete.
Un pinchazo que iba dando la lata desde el día anterior y que precisó de intervención en forma de mecha.
El último punto de agua, la Fuente del Rosal.
Dejando atrás el Albergue de Ubeire una horquilla a derechas y el sol castigando.
Desde la Fuente del Rosal hasta el Cortijo Lorenzo, y después de pasar el Albergue de Ubeire que nos quedaba a nuestra izquierda y en el que no reparamos hasta que lo habíamos dejado muy atrás, todavía quedó un tramo en subida que se hizo duro con el calor y los kms que ya llevábamos hechos. Después de la subida todo lo demás fue en descenso hasta llegar al cruce con la Zona de Acampada Controlada de la Roza, carretera asfaltada que lleva al pueblo de Abrucena y que a nosotros nos llevaría a nuestro lugar de pernocta.
En Cortijo Lorenzo, como en todos los sitios por donde pasamos estuvimos muy bien atendidos por su propietaria, Juani. Sin necesidad de desviarse como hicimos nosotros, esta persona tiene otro alojamiento al pie mismo de la pista unos kms. antes que resulta perfecto, el Cortijo Puntal Redondo.
Jérez del Marquesado-Cortijo Lorenzo. 94 Kms. Una etapa con mucho calor.
Continúo asombrada ante la belleza de los paisajes. Y el clima parece sensacional. Leerte es un viaje, Jose! Felicitaciones!
ResponderEliminarAbrazo porteño!
No tenía el placer de conocer a Carlos pero este sábado tuve ocasión de compartir unas cuantas pedaladas y conversación camino de Covadonga con él y me parece que es la pata que le hacía falta a esa mesa que formáis Jose,Javier y tu.
ResponderEliminarEspero tener otra ocasión para poder compartir mas charla y mas pedales.
Un saludo y menuda trasnevada que os marcasteis
Un placer haber compartido sendas contigo Fermin. Espero y deseo vuelva a repetirse la expriencia. Increible componente humano el de los Btt Repechín. Teneis abierto el cupo de fichajes?
ResponderEliminarCharlynos
La última foto es un buen resumen del viaje. Es demoledora.
ResponderEliminarSaludos
Que maravilla de paisajes... todo verde, nieve en la montaña.
ResponderEliminary no hacen falta muchas pelas... buena compañia, la bici y esos paisajes y tienes recuerdos e historias para toda la vida.
Desde ti erras holandesas leo tucronica y lloro de emocion. Jajaja. Un abrazo
ResponderEliminar