lunes, 3 de noviembre de 2014

Plenilunio



Partimos con el sol naciente
albergando la frágil convicción
de que al fin todo acabaría siendo
aventura propicia para sentirnos uno
entre tanto sentimiento amordazado,
tanta vida y tanta muerte superpuestas.

Los segundos, estatuas de agua,
crecían al azar deshilvanando el tiempo.

Las nubes arriba, tambores de silencio
para el paso inexorable de los días.

Presentíamos la duda como espada enemiga
con quien batirnos en cada encrucijada.
El camino era incierto
soñábamos con bellos precipicios
donde arrojar lo que de amargo pudiera acompañarnos.

***

Se adivinaban ya ríos ocultos
apenas iniciados
al viaje fabuloso, a las arduas geografías
coronadas por un rumor creciente
de cántaros y peces.

Una suerte de frutas abismales
-agridulces, lejanas-
fue el hallazgo primero de nuestros labios secos.

Luego una extraña alquimia de pieles recobradas,
un ligero sopor desde las sienes
(Rastros, lugares, encuentros clamorosos
volvían bajo un signo azul y cósmico
nacido como llama entre la nieve).

Al despertar nos deslumbró la imagen imperfecta
de una estrella labrada en espejos infinitos.
(Alberto Vega, Plenilunio)

Que cada instante es precioso ya te lo había dicho, y no he podido hacer más para tratar de acercarte a uno de ellos que compartí con Eva Argüelles a la flauta, Dimas Coalla a la guitarra y Ana Inés López en la narración de algunos poemas de Alberto Vega pertenecientes a su obra Plenilunio en el recital que dieron en favor de la ELA. Uno se siente afortunado por momentos como ese y los que siguieron.


1 comentario:

Tus comentarios enriquecen este blog. Gracias.

Otras cosas

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...