lunes, 3 de agosto de 2015

Vía de la Plata. Zafra - Mérida. Etapa 3.


Ésta etapa fue la más corta de la ruta pero no hubiese sido de recibo pasar por Mérida sin dedicarle una visita y así lo programamos como lo fuímos programando todo, casi sin querer. Aunque hubiésemos querido ir más largo, nada más lejos de nuestra intención, el tremendo calor no nos lo habría permitido.

26º C había en la bonita Zafra cuando salimos a las siete menos cuarto de la mañana, y con tan agradable temperatura empezamos a pedalear. 


Los momentos en los que deberíamos aprovechar para avanzar los aprovechábamos de otra manera, ¿cómo podrías no detenerte y disfrutar de ese amanecer sobre Los Santos de Maimona?


 Bajando hacia Los Santos 


Y atravesando sus calles encaladas.


Vides, olivos y una pista llana para rodar muy cómodos hasta Villafranca de los Barros, "la ciudad de la música". Un nombre que le viene de tiempo atrás cuando se impuso como costumbre entre los vecinos, reunirse en días señalados y fiestas para asistir y participar en espectáculos particulares y públicos con la música como protagonista.




Y entre las vides una autopista de tierra para nuestras bicicletas por la que rodamos muy rápido camino de Torremejía.


La única sombra que se pudo aprovechar en toda la ruta fue la que le brindó a Jose el monolito informativo a la altura del cruce con Almendralejo, que quedó a nuestra izquierda.



Y así, por esas pistas llanas y con mucho calor llegamos a nuestro destino, Mérida, Augusta Emérita, la capital de la provincia romana de Lusitania fundada en el año 25 a. C. para acoger a los soldados veteranos de las legiones V Alaudae y X Gémina.



Inmortalizados delante del puente romano sobre el Guadiana.

Fue un buen día el que pasamos en Mérida, nos alojamos en el caluroso albergue Molino de Pan en la orilla del Guadiana, tuvimos sobremesa entre amigos con la visita de Lorena, Rubén y su hija Alba que subían a casa de vuelta de sus vacaciones, hicimos turismo y hasta tuvimos la suerte de encontrarnos con Ana, la ciclista invisible. Sabíamos que existía porque la habíamos conocido en Zafra el día anterior, pero no sabíamos que era tan veloz. Toda la jornada viendo la marca de sus ruedas pero de ella, ni rastro. Al final, un encuentro casual, una cena frugal y una charla distendida y amena que continuaría al día siguiente. 


 Bajo el Arco de Trajano.


Una visita que nos hizo mucha ilusión.




Habrá que volver a ese teatro a una hora en que haya función.



Ensayos al aire libre en el Templo de Diana, lugar de afortunados encuentros.

Zafra - Mérida, 67 calurosos km.

4 comentarios:

  1. Guapo guapo. Y tu lo disfrutaste más si cabe.
    Charly

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  2. Me encanta, ya sabes que me gusta mucho tus rutas y además Extremadura para mi es especial...
    Besos a porrillo, que te debo muchos

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  3. Muy chulo!!! A nosotros nos presto mucho veros también. Un beso. Lore

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  4. Muy guapa!! Dura esa zona con el tema del calor.
    Claro que tenéis que volver a ese escenario y en tiempo adecuado para disfrutar de una representación. Nosotros lo hicimos y fue una grata experiencia
    Un saludo

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