El notario

Ayer, recuperando la habitual cita de los domingos, bastante alterada por eso de las vacaciones de unos y otros, mi tocayo José Luis y un servidor (el tercer Jose está exprimiendo los últimos días de "vacas") decidimos, como siempre sobre la marcha, poner rumbo al Cordal de Peón. Al paso por la gijonesa plaza del Marqués, esa donde se erige la estatua del Rey Pelayo, y punto de partida de "Los Repechinos", nos acercamos a curiosear su plan del día. ¡Sorpresa! sólo estaba Fermín que ante nuestra presencia como testigos ejerció de notario y filmó una panorámica de 360º dando cuenta de la desbandada de su tropa. Al final no fue tal si no un malentendido cuyo desenlace está en su crónica.

Naturalmente se nos unió y, dándole a la lengua pues ninguno somos mudos y aunque lo fuéramos daría igual, nos plantamos en el Alto de La Cruz donde a nosotros nos esperaba el Cordal y al notario la bajada a Peón -tenía que aprovechar el día de playa-. Poco más hay que contar, en otros tiempos era difícil internarse por esos lugares y no se cruzar con algún biker pero ahora lo cruzas en solitario y en silencio, ayer no se escuchaba ni a los pájaros. Volvimos descendiendo por Argañoso hasta Peón y salvando el Curbiellu nos plantamos en la bajada del camping para enlazar con la senda de Deva. Calurosa y aprovechada mañana.