No soy Julio Verne, me cuesta ver el futuro y como fotografiarlo es imposible, prefiero el pasado hecho de recuerdos ciertos e imaginados.
Si buscas en tu memoria, facilmente encontrarás un día en que caminaste bajo la lluvia, pero si tienes unos años, será un instante parecido a este congelado en el color de la infancia pasada. Bajo la protección de un paraguas o sintiendo el agua arrollar por tu pelo y tu rostro, habrás dejado tus huellas sobre un pavimento mojado cubierto de reflejos titilantes que escapan de las sombras, de esas sombras fieles, compañeras y en ocasiones invisibles, que siempre nos acompañan.
Nights in white satin- The Moody Blues
El futuro no existe, al menos, no como imaginamos que será. Siempre nos sorprende con algo mejor o peor de lo que esperábamos o... simplemente nos sorprende. El pasado, ya pasó, existió y para muchos aún perdura en nuestros recuerdos inundándolos de nostalgia y melancolía.
ResponderEliminarEn cuanto al presente,...está rodeado de sombras, de dudas, de recuerdos del pasado y preguntas hacia el futuro...El ser humano es así, vive de recuerdos esperando, planificando e imaginando su futuro...Mejor no ser Julio Verne...
Hay que tener cuidado con el pasado, muchas veces ante la incertidumbre del futuro, nos refugiamos, nos acurrucamos en los buenos recuerdos, e incluso cuando los recuersdos no son tan buenos, los llenamos de bondad para poder anclarnos a ellos...
ResponderEliminarNo tengas miedo del futuro, no te hace falta ser Julio Verne ...porque Julio Verne sólo hubo uno.
Predecir el futuro siempre es difícil, por no decir imposible. Que monotonía si supiéramos de antemano lo que va a ir sucediendo. Los recuerdos, a veces, son un lastre que no nos deja disfrutar el presente. Es difícil escoger en que tiempo vivir ¿en el ayer, el mañana o el hoy?
ResponderEliminarMe gustó la melancolía que tiene esta entrada. Yo suelo preocuparme por el futuro, reflexionar sobre el pasado y vivir el presente. Dos por tres me quedo demasiado pensando en el pasado o en el futuro y ahí se desequilibra mi presente, pero nada más. Hasta ahora no me ha ido tan mal.
ResponderEliminarBesos.