martes, 2 de febrero de 2010

Mens sana in corpore sano...


y viceversa. Da gusto ver como los amantes del deporte a cualquier nivel se implican en acciones solidarias y ver como gente sencilla, con trabajos normales y sin grandes medios emprende y colabora o participa en esas iniciativas. No sé si es la mente sana la que empuja al cuerpo o si es la necesidad de tener un cuerpo sano la que obliga a la mente a limpiarse de rencores y envidias para mirar a quien más lo necesita, lo cierto es que hay personas que dan el paso de hacer cosas y lo consiguen y yo los admiro. La ruta de la seda solidaria toca a su fin, aunque quizás no sea el término exacto, sus protagonistas Emilio y Machus nos han enseñado este año lo lejos que se puede llegar sobre una bicicleta cuando uno tiene una buena razón y nos han demostrado eso de que el viaje más largo comienza con un solo paso o como en este caso, con una sola pedalada. Su bici-aventura al Nepal para poner su grano de arena en ayudar a la fundación Karuna-Asia seguro que abrirá otras puertas, otros viajes solidarios. Vaya desde aquí mi más sincera felicitación por haber acabado con éxito esa ruta, experiencia increíble tanto a nivel físico como espiritual y emocional.
Por Laviana, Héctor Moro, joven presidente de la Asociación Deportiva Desnivel 0%, ha puesto en marcha hace poco la venta de unas pulseras solidarias, con el fin de ayudar al Centro Ocupacional CAI de Langreo, centro para la integración de personas con discapacidad. Las pulseras llevan grabado el lema "Do you want?... you can!" y creo que ahora va a sacar otras asturianizándolo para convertirlo en un "Si quies, ...Pues". La iniciativa ha tenido bastante éxito y los miembros de su equipo y colaboradores están extendiendo mucho el radio de acción.
Otros que se suman al apoyo a los que más lo necesitan son los protagonistas del desafioastursolidario, Manuel Ignacio Bueno, Lorenzo del Pozo, Juan del Valle y Florentino González. Gente acostumbrada a sufrir y que quiere que su sufrimiento sea útil para COCEMFE. Ánimo a todos, especialmente al "bueno" de Bueno con el que compartí mili en Valladolid. Hace veinte años a estas alturas estábamos licenciándonos y ahí sigue dando caña. Enhorabuena a todos.

2 comentarios:

  1. bonitas historias y bonita gente la que lo cuenta.Blue

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  2. Hola Jose Luis, creo que no tengo el gusto de conocerte pero me encantaría.
    Muchas gracias por tú comentario.
    Cuelgo tu blog en los enlaces del mío para poder seguirte.
    Un saludo.
    Héctor Moro.

    ResponderEliminar

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