La casualidad quiso ayer que me cruzara por el carril bici de Poniente con Joserra, los dos habíamos decidido salir con nuestras bicis a la misma hora y aunque llevábamos direcciones opuestas su propuesta de ver cazar a un halcón era irrechazable. Le acompañé. A Joserra me lo presento Bluetomate el sábado, él es amigo del viento, lo conoce y vive de él, con él juega hasta límites reservados a unos pocos, y gracias a él ha recorrido países y visto paisajes igual que lo hacen los pájaros. Ayer le acompañé, disfruté de su conversación y su compañía, y me llevó a ver un halcón que estaba de servicio. Durante todo el camino, como si fuera con él, como si fuera él, nos acompañó el viento.
Dust in the wind, polvo en el viento, eso era lo que veía cuando bajaba detrás de Joserra, bueno veía eso y las huellas de sus derrapadas. Hay gente que no puede vivir sin adrenalina.
Dust in the wind, polvo en el viento, eso era lo que veía cuando bajaba detrás de Joserra, bueno veía eso y las huellas de sus derrapadas. Hay gente que no puede vivir sin adrenalina.
La adrenalina es buena, deberías probarla de vez en cuando...seguro que luego ya no podrías vivir sin ella....
ResponderEliminarMis dosis de adrenalina son directamente proporcionales a mi apetito.
ResponderEliminaruna verdadera gozada.me alegro.blue
ResponderEliminarYa había oído hablar de los halcones que trabajan en Cogersa ahuyentando gaviotas. Tengo entendido que los machos solo asustan, pero las hembras atacan (de los halcones estoy hablando, aunque… ¿será trasladable a otras especies?)
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